Quiero que utilices tu
imaginación y la percepción de tus nuevos
ojos para verte a ti mismo viviendo un sueño
nuevo, una vida en la que no sea necesario
que justifiques tu existencia y en la que
seas libre para ser realmente quien eres.
Imagínate que tienes
permiso para ser feliz y para disfrutar de
verdad tu vida. Imagínate que vives libre de
conflictos contigo mismo y con los demás.

Imagínate que no tienes miedo de expresar
tus sueños.
Sabes qué quieres,
cuándo lo quieres y qué no quieres.
Tienes libertad para
cambiar tu vida y hacer que sea como tú
quieras.
No temas pedir lo que
necesitas, decir que sí o decir que no a lo
que sea o a quien sea.
Imagínate que vives sin miedo a ser juzgado
por los demás.
Ya no te dejas llevar
por lo que otras personas puedan pensar de
ti.
Ya no eres responsable
de la opinión de nadie.

No sientes la necesidad
de controlar a nadie y nadie te controla a
ti.
Imagínate que vives sin juzgar a los demás,
que los perdonas con facilidad y te
desprendes de todos los juicios que sueles
hacer.
No sientes la necesidad
de tener razón ni de decirle a nadie que
está equivocado.
Te respetas a ti mismo
y a los demás, y a cambio, ellos te respetan
a ti.
Imagínate que vives sin el miedo de amar y
no ser correspondido.
Ya no temes que te
rechacen y no sientas la necesidad de que te
acepten.

Puedes decir "TE QUIERO
" sin sentir vergüenza y sin justificarte.
Puedes andar por el
mundo con el corazón completamente abierto y
sin el temor de que te puedan herir.
Imagínate que vives sin miedo a arriesgarte
y a explorar la vida.
No temes perder nada.
No tienes miedo de
estar vivo en el mundo y tampoco de morir.
Imagínate que te amas a ti mismo tal como
eres.
Que amas tu cuerpo y
tus emociones tal como son.
Sabes que eres perfecto
tal como eres.

La razón por la que te pido que imagines
todas estas cosas es porque
¡todas
son posibles!
Puedes vivir en un estado de
gracia, de dicha,
en el
suelo del cielo.
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